Siempre me gustó el invierno.
El frío me ayudaba a estar mas activo, como que estaba más alerta, y reaccionaba más rápido, a diferencia del verano, el calor me producía el efecto contrario, me ralentizaba, como que me quitaba fuerza incluso en algunas ocasiones. De todos modos hace un tiempo conoci un calor mayor al que conocía, pero la nueva experiencia daba animos de seguir en movimiento.
Pero siempre preferí el frío, por eso prefiero el sur que al norte.
Y hace poco me llevé una sorpresa con una simpática coincidencia....
Escuchaba Las Cuatro Estaciones de Vivaldi, y la parte que mas me gustó, fue el concierto en FA Menor op.8 n°4, quizas mas conocida como... El Invierno.
Es justo en el invierno cuando la naturaleza nos recuerda su presencia de manera continua, de manera muy palpable. Los vientos helados, la lluvia, las tormentas (cuando las hay), el granizo. Es bello, y a la vez conmovedor, cuando vemos que la naturaleza nos muestra que a pesar de nuestros avances como raza, aún somos seres frágiles.
Les reproduciré un poema que incluye el disco de Las Cuatro Estaciones, que indica que pudo ser escrito por el propio maestro.
El Invierno
Temblando congelado entre la nieve fría,
entre fuertes ráfagas de un horrible viento,
corre golpeando los pies en cada paso
con tititar de dientes entre el hielo.
Y pasar días de paz y dicha junto al fuego
mientras la lluvia fuera a todos moja.
Caminar sobre el hielo a paso lento
por temor a caer con andar atento.
Avanzar, resbalar y caer al suelo,
de nuevo sobre el hielo y correr mucho
hasta que el hielo cede y se abre en dos.
oír salir de las puertas de hierro
a Siroco, Bóreas y todos los vientos en contienda.
Este es el Invierno, que también trae dicha.
1 comentario:
¡A mí me gustan las cuatro estaciones! Cada una tiene su magia. Del invierno me gusta el café caliente y el olor a lluvia.
¡Vivaldi fue un maestro!
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