Escribo sobre la exposición de los soldados chinos de terracota cuando la mencionada exposición ya se encuentra en sus últimos días, pero con la subjetiva impresión de que ya todos la habrán disfrutado.
Es algo impresionante poder presenciar las milenarias esculturas cuya data procede desde 200 años antes de Cristo, en tiempos que la antigua China empezaba a conformarse el imperio que sería mas adelante. Cabe decir, que aún hoy se están encontrando más guerreros, a los cuales se les está buscando crear un sistema mediante el cual no se desaparezcan los colores originales con los que fueron pintados, pero que al entrar en contacto con el aire, se desaparecen.
En lo personal, se cumplió un personal deseo de poder conocerlas, deseo que imaginaba podría llegar a realizar solamente mediante un viaje al extranjero, pero que el año pasado, pude realizar para mi entera satisfacción.
Una exposición imperdible, a la cual si aún no han asistido, vayan que el tiempo se acaba. Aquí les dejo unas fotos de los originales guerreros de terracota.